Yamaha estuvo presente en la edición 2017 del Wheels & Waves 2017 y aterrizó en Biarritz este verano con su especialísima mezcla de acción custom sobre dos ruedas envuelta en un estilo cool y relajado. Faster Sons de Yamaha han vuelto a convertirse en un referente este año, tanto en los momentos de acción como en los más relajados. Tras establecer su base en la Cité de L’Ocean con un impresionante conjunto de máquinas Yard Built, Faster Sons puso rumbo a España para dejar su huella rebelde en el temible circuito de carreras de Flat Track «El Rollo», ganando la carrera Hooligans con Marco Belli a los mandos de una SCR950.
Asimismo la cultura tomó relevancia con el evento Art Ride, a la espera de que llegara el momento de poner a prueba el coraje y la sangre fría en las carreras de Punks Peak, en la ladera de la montaña. Se ganaron trofeos, se forjaron amistades y la filosofía Faster Sons se propagó entre los miles de aficionados a la motocicleta que peregrinaron al corazón del País Vasco en busca de ruedas, olas, y la libertad sobre una motocicleta.
Wheels and Waves 2017 de este año acogió ocho proyectos Yard Built de diferentes países de Europa, creados en colaboración con constructores nacionales, distribuidores de Yamaha y prensa especializada del mundo de las dos ruedas. Todas las versiones se basan en la Yamaha XSR 700 ó XSR 900, lo que demuestra de nuevo que ambas motos encarnan la base perfecta para proyectos de personalización.Ocho proyectos diferentes, todos con la filosofía del programa Yard Built de no cortar ni modificar radicalmente el bastidor, han cristalizado en ocho motos impresionantes, cada una con un carácter propio que refleja el estilo de su constructor.
«Estamos muy satisfechos con este proyecto porque de nuevo hemos podido mostrar cómo la XSR es una base perfecta para todo tipo de personalización. Ninguna de estas ocho motos se parecen entre sí. Cada constructor ha visto algo único en la moto de partida, y su visión se ha materializado en una creación propia. Teniendo en cuenta las reglas por las cuales la moto debe poder conducirse sin restricciones y no debe haber grandes modificaciones en el bastidor, es increíble cómo todas son tan diferentes…», comentó Cristian Barelli, Coordinador de Marketing de Yamaha Motor Europe. «Las motos están hechas para conducirlas, no solamente para admirar su belleza, por lo que, para demostrar el comportamiento en pista de las ocho máquinas Yard Built, han competido sin tregua en pruebas con trofeo en la legendaria carrera de Punks Peak. Los constructores han sabido plasmar a la perfección el espíritu Faster Sons. ¡Nos vemos el año que viene en Biarritz!».