El pasado 2 de mayo, con motivo del Día Internacional contra el Acoso Escolar, Repsol lanzó una campaña en la que denuncia este grave problema social y busca crear conciencia directamente desde las escuelas. Así, la compañía quiere transmitir un mensaje claro y rotundo que ayude a erradicar una situación que todavía sufren muchos niños y jóvenes.
Los más de 1.200 alumnos del Colegio Sagrada Familia de Jorge Juan, en Madrid, han recibido el día de ayer a cuatro campeones del mundo, los pilotos del equipo Repsol Honda de MotoGP: Márquez y Pedrosa, recién llegados del Circuit Ricardo Tormo; y Bou y Fujinami, que ya preparan el inicio del Mundial X-Trial pero ha encontrado tiempo para reunirse por una causa que vale la pena: la lucha contra el acoso escolar.
«El acto de hoy es casi una tradición. Después del test de Valencia, visitamos un colegio gracias a Repsol y conocemos a los ganadores del proyecto vencedor. Venir a un acto como este, con tantos niños, siempre es bonito y más si es por una causa como la lucha contra el acoso escolar. Poder aportar nuestro grano de arena es importante, y también ver cómo los niños disfrutan y se emocionan» declaró Márquez tras llegar de conseguir su sexto título mundial.
Los alumnos de este centro madrileño han recibido la visita de los pilotos tras convertirse en los ganadores del concurso organizado por Repsol en su página web . Para participar, cada colegio tenía que elaborar un vídeo que reflejase valores como la tolerancia y las acciones que están llevando a cabo para evitar situaciones de acoso escolar. En total participaron 47 centros de toda España y los diez colegios con más apoyos pasaron a la última fase.
Finalmente, el vídeo ganador fue el presentado por el Colegio Sagrada Familia de Jorge Juan, en el que todos los alumnos unen sus voces en contra del acoso escolar. Este centro cuenta con un plan de actuación y prevención contra el bullying en el que están implicados tanto estudiantes como profesores y familias. Ante las preguntas de los niños, los pilotos Repsol han recalcado que la clave para combatir esta lacra es el compañerismo y el respeto, sin dejar solos a los que lo sufren.