Laia Sanz ha sumado su quinto título mundial de Campeona del Mundo de Enduro al imponerse en la segunda carrera del Enduro de Francia, que ponía fin al campeonato. Laia, junto con sus cinco títulos mundiales de enduro, tiene otros 13 más de trial, por lo que ya suma nada menos que 18 coronas mundiales que recuerdan mucho a las 20 que celebrábamos hace unos días de Toni Bou, piloto con el que Laia Sanz compartió zonas en su etapa deportiva de trial.

Esta temporada Laia Sanz no lo ha vuelto a tener nada fácil, tras tener que luchar con la piloto alemana Maria Franke que también tenía posibilidades al título hasta esta última cita. Las dos pilotos hicieron las delicias del público que dio cita en Cahors (Francia). “Hemos estado toda la carrera luchando con tiempos muy igualados. Sabía que Franke iría muy fuerte así que he apretado más que ayer. Al final, ganar así, con emoción y una gran lucha, ha sido muy bonito. Estoy muy contenta por los 18 títulos y por el quinto de enduro, sobre todo porque ha sido un año difícil y puedo estar satisfecha de haberlo hecho bien en los momentos de mayor presión“, comentaba Laia Sanz.

Laia Sanz tiene nada menos que 18 títulos mundiales en su palmarés, cinco de enduro y 13 de trial, sin contar todos los éxitos aculados en el Dakar, además de otras competiciones. Se trata de una de las principales figuras del off road mundial.

Laia, piloto de KTM, nunca se ride. Su experiencia en el Dakar o en los campeonatos de Trial donde también corría en las categorías no reservadas sólo para mujeres, han forjado el carácter de una de las mejores especialistas de off road del mundo, independientemente de su sexo.

Laia Sanz, en acción, durante el Campeonato del Mundo de Enduro

“Ha sido la temporada más difícil y disputada que he tenido hasta ahora. Después de un inicio en el que todo me fue adverso, creo que he estado muy fuerte psicológicamente y eso me ha permitido llegar al final dependiendo de mí. No ha sido fácil porque después de Finlandia y Suecia llegué a verme sin el título. Se juntaron demasiadas cosas: después del Dakar y los rallys de Abu Dhabi y de Qatar no había podido entrenar, tenía moto nueva y no había tenido tiempo de adaptarme a ella… pero después todo volvió a la normalidad. Pude preparar las carreras de Euskadi y fui conociendo mejor la nueva moto, con la que me siento mucho mejor“.