Tras la enorme caída de ventas y el impacto de la pandemia del COVID-19 las ventas de motos en Europa se han desplomado de forma drástica. Durante este año, que ha entrado en vigor la normativa Euro 5, se debería de haber aprovechado para liberar todo el stock de los modelos con homologación Euro 4. Pero las motos no se han vendido y siguen en los almacenes. Esta situación podría ocasionar que las motos producidas y no vendidas no pudieran ser comercializadas por no cumplir con lo que establece la ley.

De esta forma la industria de la moto ha solicitado a la Comisión Europea una moratoria en la comercialización de los modelos Euro 4.

Debido al carácter estacional del mercado, con ventas concentradas en la primavera, el impacto del cierre del mercado en marzo y abril ha sometido al sector a una gran presión financiera. La imposibilidad de vender en este periodo ha provocado un exceso de stock de vehículos Euro 4, que pueden quedar fuera del mercado debido a cambios en la reglamentación a final de año.

Adicionalmente, la industria europea de las motocicletas acoge con beneplácito las diversas medidas de apoyo a la economía que han adoptado los Estados Miembros y la Comisión.

La industria de la moto pide una moratoria para la aplicación de la normativa Euro 4

La industria de la moto pide una moratoria para la aplicación de la normativa Euro 4

Caída drástica en todos los grandes mercados europeos

Las matriculaciones en los 5 mayores mercados de motocicletas (Francia, Alemania, Italia, España y el Reino Unido) cayeron un 39,6 por ciento en marzo de 2020, en comparación con el mismo mes de 2019. La situación se deterioró aún más en abril de 2020, cuando las matriculaciones combinadas en los mercados más grandes cayeron un 74,9 por ciento, llegando en algunos países a contraerse entre un 84 por ciento y un 96 por ciento.

El segmento de los ciclomotores se vio igualmente afectado. Los mayores mercados europeos de ciclomotores (Alemania, Bélgica, España, Francia, Italia, Países Bajos y Polonia) se redujeron en un 37,9 por ciento en marzo de 2020 en términos interanuales. En abril de 2020, las matriculaciones de ciclomotores en los mismos mercados disminuyeron un 55,1 por ciento.

Para Antonio Perlot, secretario general de ACEM, «Con el reinicio progresivo de la actividad, los datos de los próximos tres meses nos darán una visión más clara del impacto final del virus COVID-19. No obstante, ya está claro que 2020 será un año muy difícil para el sector, con perturbaciones extraordinarias en la actividad de los fabricantes, concesionarios y proveedores. ACEM y sus miembros están trabajando junto con la UE y las administraciones nacionales para encontrar una solución al problema del exceso de existencias de cientos de miles de vehículos Euro 4. Para ello será necesario revisar la legislación pertinente a fin de que los concesionarios de motocicletas de toda Europa puedan recuperarse de los efectos de la crisis de COVID-19 lo antes posible».

Por su parte, José María Riaño, secretario general de ANESDOR, y representante de las asociaciones nacionales europeas en el Comité Ejecutivo de ACEM: “El Ministerio de Industria está trabajando para defender esta solución ante un problema que aquí nos afecta significativamente. Confiamos seguir trabajando con ellos hasta lograr una situación satisfactoria para España. Es necesaria una moratoria para la liquidación de stock de motos Euro 4, de lo contrario, solo en España, podríamos encontrarnos a final de año cerca de 80.000 motos que no podrán venderse”.